el gran amor, esperamos encontrar el éxito, la fortuna, la gloria, y si no se presentan,
nos sentimos desdichados. En realidad, la felicidad no es algo que pueda venir o no,
así sin más, del exterior, sino un estado de conciencia que depende de una buena
comprensión de las cosas. No debemos imaginarnos que hemos venido a la tierra
para vivir en la facilidad, los placeres y la abundancia. Hemos venido a la tierra para
aprender y perfeccionarnos. Pero, ¿cómo perfeccionarnos si no tenemos cada día
nuevos problemas que resolver, nuevos obstáculos que superar? La tierra es una
escuela y, como en todas las escuelas, sólo aquéllos que aprenden y progresan
pueden sentirse felices.

o de condiciones favorables. La felicidad real, definitiva, sólo puede venir de vosotros,
de vuestra forma de considerar las cosas y de trabajar. Con un buen razonamiento, con
una buena filosofía, podéis haceros dueños de vuestra felicidad. Y sobre todo no la
esperéis sin hacer nada. Sois vosotros los que tenéis que actuar y aplicar los métodos
que van a permitiros transformar las penas en alegrías y los fracasos en éxitos.»
Estoy de acuerdo en casi todo, muy buena reflexión, gracias por compartirla.
Abrazo de luz
¿QUIERES VER A DIOS?
¡LEE ESTO!
Las tres cosas que te alejan y
Las tres que te acercan a Dios
– El exceso de alcohol te aleja de Dios
– El exceso de drogas te aleja de Dios
– El exceso de sexo sin amor también te aleja de Dios
Las tres que te acercan a Dios
– Ama a tu prójimo como a tí mismo
– Aprende a perdonar y
– A ser humilde
Eternamente
Joaquín Gorreta Martínez 62 años